Por un lado, la línea de transmisión asumirá un rol importante en la zona y, por otro, aportará al proceso de descarbonización de la matriz energética de Chile.
16 puntos estratégicos conforman la Política Energética Nacional de Chile, siendo uno de los objetivos más importantes la generación de energía sin emisiones de CO2. Otro objetivo relevante es que exista un acceso universal y equitativo a este recurso, lo que implica un trabajo de ampliación de nuestro Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
En este sentido, son varios los proyectos que aportarán a que más personas puedan acceder a las energías limpias, siendo los de transmisión uno de los más importantes.
Las líneas de transmisión son las encargadas de transportar la electricidad generada en las plantas de energía renovable y de hacerlas llegar a los centros de distribución desde donde se reparten hacia los hogares y centros de consumo.
Uno de los proyectos de transmisión que actualmente está en proceso de evaluación ambiental es Tineo-Nueva Ancud, cuya construcción estará en manos de Transelec y que significará mayor seguridad y robustez en el suministro de energía en la región de Los Lagos y, en particular, en la isla de Chiloé.
En este artículo te contamos más detalles.
Una nueva línea para Los Lagos y Chiloé
Uno de los objetivos centrales del proyecto liderado por Transelec, será mejorar el suministro eléctrico de los habitantes de la región sureña y sobre todo para Chiloé.
Esta isla, que cuenta con una línea de transmisión que cruza el Canal de Chacao y que tiene más de 25 años de antigüedad, necesita de una nueva línea que le permita asegurar el suministro ante el alza prevista en la demanda energética de los próximos años.
“Tineo-Nueva Ancud actuará precisamente como un respaldo y le otorgará redundancia a la isla. Esto quiere decir que, en caso de cualquier emergencia que ocurra con una de las dos líneas operativas, una de ellas podrá seguir transmitiendo energía y asegurará el suministro”, comenta el jefe de proyectos de Transelec, Marcelo Concha.
El proyecto supondrá una inversión de más de US$ 100 millones y un trabajo de ingeniería de primer nivel, el cual se encargará de establecer una serie de torres de alta tensión entre las comunas de Llanquihue y Ancud.
Uno de los puntos más relevantes del recorrido que tendrá 95 km de extensión será el cruce aéreo por sobre el Canal de Chacao, lugar en donde se instalará el tramo que llegará a Chiloé, duplicando a la que ya está operativa desde 1993.
Según comentan desde la compañía, es preferible que el cruce sea aéreo ya que en el caso de ser submarino, como alguna vez lo fue, es probable que presente fallas debido a las turbulentas aguas del Canal.
Tineo-Nueva Ancud y la descarbonización
No obstante, una vez que el proyecto esté terminado (tentativamente en 2024), formará parte de la vasta red de transmisión a nivel nacional y podrá aportar al proceso de descarbonización. ¿De qué manera?
Pues, actuará de dos maneras. Por un lado, la nueva red de 500 kV permitirá el ingreso de más energía proveniente desde el continente hacia Chiloé y, por otra parte facilitará la salida de energías renovables que se generan en la isla y Los Lagos a otras zonas del país que no poseen generación propia.
En este sentido, proyectos como Tineo-Nueva Ancud contribuyen al desarrollo de un sistema de transmisión solidario que democratiza el acceso a las nuevas energías, actuando como un puente bidireccional.
En cuanto a sus características, según indican en la web del proyecto, tendrá un total de 251 torres de alta tensión y la aprobación de su Estudio de Impacto Ambiental (EIA) sigue pendiente.
